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Problemas de salud bucal en verano y cómo evitarlos

Problemas de salud bucal en verano y cómo evitarlos

Cuando organizamos nuestras vacaciones de verano es normal que pensemos antes en las playas en las que queremos disfrutar de la brisa marina y del sol, que en los lugares y momentos en los que nos limpiaremos los dientes después de comer. Sin embargo, nuestra salud bucodental no se va de vacaciones y si nos olvidamos de ella puede pasarnos factura. 

La cantidad de personas que después de las vacaciones de verano acuden a sus dentistas con infecciones en la boca o molestias en los dientes, es muy significativa. En este blog vamos a contarte por qué no puedes tomarte unos días de fiesta por lo que hace a cuidar tu salud bucodental y qué 5 hábitos de higiene bucal no debes olvidar.

El horario puede cambiar, el sitio puede ser otro, pero la regularidad del cepillado dental debe ser la misma, y si no quieres que te aparezcan o se te agraven tus problemas bucodentales después de tu merecido descanso laboral, lee con atención este blog.

¿Qué pasa cuando descuidas tu higiene bucal en verano?

En verano, aparte de relajarnos en la orilla del mar, también tendemos a relajarnos por lo que hace a nuestras rutinas y nos permitimos ciertos hábitos, alimentos y bebidas que durante el año no realizamos o no consumimos tanto. Este hecho hace que nuestra salud dental esté en riesgo durante las vacaciones y puedan aparecer o agravarse las siguientes afectaciones bucodentales:

  1. Aumento de la placa bacteriana.

    Como ya hemos comentado, debido a la modificación de nuestra rutina, es común que se descuide más la higiene oral y que, por consiguiente, la presencia de placa bacteriana aumente en nuestra cavidad bucal. Esta disminución o alteración de la frecuencia y de la técnica del cepillado también puede ocasionar un empeoramiento de nuestra salud gingival.

  2. Aparición o empeoramiento de la halitosis.

    En verano, las altas temperaturas pueden provocar que la hidratación de la mucosa oral disminuya, igual que el flujo de la saliva, ocasionando la aparición o aumento de afectaciones como la halitosis y la sensación de boca seca o xerostomía.
    Por otra parte, si a estas afectaciones se les suma la disminución de higiene bucal anteriormente comentada y, además, si eres una persona fumadora, el aumento del consumo de tabaco puede agravar mucho más el estado de tu boca. El incremento de la ingesta de bebidas alcohólicas también es perjudicial para la salud bucal en verano.

  3. Aparición o empeoramiento de la

    sensibilidad dental. ¿Te duelen los dientes al consumir helados o refrescos fríos? El aumento del consumo de alimentos y bebidas frías durante el período estival es un hábito que puede producir sensibilidad en los dientes. La raíz del problema reside en que la mayoría de estos productos suelen tener un pH ácido y si no se realiza el cepillado dental de forma correcta, el riesgo de desmineralización o desgaste de los cuellos de los dientes puede aumentar, haciendo que la dentina quede expuesta y aparezca la sensibilidad dental.
    Para aliviar este problema se recomienda reducir la ingesta de estas bebidas ácidas, evitar consumirlas de forma aislada, dejar pasar unos minutos después de ingerirlas antes del cepillado y cepillarse los dientes con un movimiento de rotación suave para no incrementar la desmineralización del diente. Por otra parte, también es recomendable utilizar pastas y geles dentífricos específicos para la sensibilidad dental.

  4. Aumento de traumatismos dentales.

    Golpes en los bordes de las piscinas, caídas al jugar un partido de fútbol al aire libre… Los traumatismos dentales aumentan considerablemente durante estas fechas y es muy importante saber cómo actuar al respecto. Antes de nada, cuando hay un golpe, es imprescindible determinar el estado del diente.
    Si este se ha caído, no hay que limpiarlo y se debe conservar en leche o saliva del paciente hasta llegar a la consulta del dentista. Es muy importante acudir durante las siguientes tres horas. Si el diente se ha fracturado, también se debe guardar el fragmento roto y pedir cita lo antes posible con un profesional de la salud dental. Por último, si el diente solo presenta movilidad, no se debe manipular ni tocar y hay que acudir lo más rápido posible al dentista para valorar el tratamiento a implementar.

Problemas de salud bucal en verano y cómo evitarlos

5 hábitos de higiene bucal que no debes olvidar:

Evita que tus hijos le cojan miedo al dentista con los siguientes consejos:

1.

Enjuágate la boca a menudo.

Si aumentas el consumo de alimentos y bebidas con alto contenido en azúcar, una manera fácil de evitar sus consecuencias es enjuagándote la boca con agua a menudo. No obstante, si es posible, siempre se debe realizar el cepillado dental después de comer.

2.

Bebe mucha agua y come más fruta.

Hidratarse bien y comer fruta con gran cantidad de agua como la sandía o el melón es muy importante durante la época estival, estimularás la producción de saliva y reducirás la sensación de boca seca o xerostomía.

3.

Protege tus dientes.

Utiliza protectores dentales al realizar deportes o actividades de riesgo y no utilices tus dientes para algo que no sea masticar. Abrir unas bolsas de patatas en la playa con los dientes o intentar destapar una botella de vino en una cena también con la dentadura, es muy peligroso.

4.

Vigila la alimentación y hábitos.

El aumento en el consumo de alimentos dulces y ácidos puede producir un desgaste del esmalte dental y causar dientes sensibles, no abuses de ellos. Por otra parte, como ya se ha comentado, el tabaco y el alcohol también perjudican la salud dental, intenta no consumir estas sustancias.

5.

No descuides tus cuidados dentales.

Si quieres disfrutar de una salud oral sana en verano y durante el resto del año, el cepillado dental matutino y el nocturno son 100% obligatorios. Nunca los pases por alto y cuida tu higiene bucodental todos los días del año.

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